lunes, 24 de octubre de 2011

La propuesta de valor es hacer diferencia en la vida de las personas.

Estuve viendo un video de Havas Media (link abajo) en el blog suelto.net, que habla sobre el nuevo foco del marketing y hace referencia a que éste ya no debiera ser al diferenciación de los productos /servicios sino el valor agregado que dan a los consumidores; lo trasladé inmediatamente a las empresas como empleadores. 
Existe un concepto, el de employer branding, que pretende trabajar sobre la propuesta de valor del empleador, es decir la fuerza de marca que tiene una empresa para sus empleados. Asimismo, conectado a este concepto, se habla también de los empleados como los "nuevos clientes" de las empresas, ya que eligen con quién trabajar, cuestionan a las organizaciones como si fueran un consumidor más, los evalúan, etc. 
Creo que las empresas que realmente trabajan sobre el concepto de employer branding, son aquellas que están interesadas en hacer una diferencia en la vida de las personas, allí reside la propuesta de valor. Hay muchas empresas que realizan acciones solidarias, brindan actividades de capacitación, programas de bienestar para sus empleados, entre tantas otras cosas. Pero hay algo que es muy sutil y se nota, que no puede aprenderse en ninguna escuela de negocios, y que implica un alto impacto en la percepción que tienen las personas sobre todas estas acciones que se implementan, y son la coherencia y el interés que ponen quienes las organizan y las llevan a cabo. Esta sutil diferencia entre hacer algo por que se debe y hacerlo con convicción y dedicación puede marcar la diferencia en el impacto que tienen este tipo de acciones en la percepción colectiva. Es evidente cuándo existe y cuándo no un interés real en las personas, en hacer una diferencia en sus vidas, en brindarles un valor agregado. Las empresas que logren ser percibidas de esta manera son las que podrán posicionarse como empleadores diferentes y deseados por las personas; las que tendrán mejor convocatoria al reclutar jóvenes profesionales y altos potenciales, ; mejores índices de compromiso en el trabajo; mejor productividad. 
Ese fuerte compromiso con hacer una diferencia en la vida de las personas que conforman la organización debe venir del top management en cascada hacia los demás niveles de la compañía, de lo contrario será mucho más complejo lograr la buena percepción de los empleados, por que habrá cortocircuitos entre lo que plantean quienes dirigen la empresa y quienes la gestionan. 
Cuando se habla de las mejores empresas para trabajar, no debemos olvidar que esas empresas están conformadas por personas. Son las personas las que harán la diferencia para otras personas, que luego con diferentes acciones y pautas irán conformando la identidad de la empresa
Producto de la intensa conectividad que tenemos hoy y de las redes sociales, las empresas están siendo cuestionadas públicamente y como siempre pasó, las malas noticias corren más rápido que las buenas. 


Como pasa en la mayoría de los casos sobre los que deseamos trabajar, no existe una receta única e infalible para desarrollar employer branding; esto se trabaja a medida, de acuerdo a la cultura y objetivos de la compañía, pero sí hay algunos aspectos básicos que debieran estar presentes:
  • Mantener la coherencia en las acciones que se toman. En un mundo tan cambiante, este  aspecto es clave para ganarnos la confianza de los otros.
  • Demostrar interés. Este punto está asociado con el anterior, ya que no faltar a lo que se prometió o se anunció es una manera de mostrar compromiso con lo que se está haciendo. Por otro lado, este aspecto debe estar presente todos los días, al momento de detectar la necesidad del otro de ser escuchado, ayudarlo ante alguna situación, acompañarlo, animarlo etc. Si recordamos la famosa pirámide de Maslow, la estima es una de las bases y es importante que se cumpla para propiciar que una persona continúe su desarrollo y crecimiento.
  • Abrir tantos canales de comunicación como sea posible. Y esto involucra a todos los niveles de la organización. La comunicación permanente te permite estar "online" de todo lo que está pasando, lo bueno, lo malo y los potenciales conflictos.
  • Conocer a las personas. Asociado al punto anterior, saber qué expectativas, motivaciones y características conforman a las personas de nuestra organización es vital para que nuestras acciones en la empresa tengan el éxito esperado. Las encuestas de clima laboral -además de las reuniones de feedback y desarrollo de carrera- suelen resultar muy útiles para conocer al público organizacional.
  • Conocer el negocio. Es importante que los empleados - todos- conozcan de qué se trata la empresa para la que trabajan, cuáles son sus objetivos, sus productos/ servicios, sus metas a largo plazo. Algunas veces la ausencia de compromiso está asociada al desconocimiento del para qué y el cómo del negocio.
  • Acciones de Responsabilidad Social Empresaria (RSE). Es una de esas tendencias que llegó para quedarse. Las acciones de RSE están presenten cada vez más en las organizaciones, incluso muchas fomentan la participación de los empleados en estas actividades. Para que las acciones de RSE tengan credibilidad, adicionalmente a la comunicación que se haga sobre éstas en los medios, las mismas deben vivirse puertas adentro en la compañía y tener presentes varios de los aspectos que mencionamos antes. 
Las empresas pueden invertir millones en los medios de comunicación, en publicidades televisivas y campañas gráficas, pero no habrá mejor inversión que la "buena publicidad" que hagan sus propios empleados.


Video de Havas Media: http://www.youtube.com/watch?v=eDnpWPvixjA&feature=player_embedded

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